Podríamos hacer el encuentro del Checalecalon en Dichato, de todas maneras, invito al comité organizador de Concepción a tomar este desafío. He eschuchado que se estaba desechando Dichato por que no existirían las condiciones, pero yo creo que las condiciones son óptimas. Es el momento de demostrar que tan solidarios somos realmente. Dichato necesita mucho apoyo para levantarse y creo que nosotros algún grano de arena podemos aportar. se puede coordinar el encuentro con algún grupo de representantes de Dichato, que si bien no les significará un gran aporte económico, les puede servir mucho para demostrar que es posible levantarse, que es posible reconstruir, no solo la infraestructura, sino reconstruir los sueños, reconstruir la esperanza, reconstruir el ánimo de un pueblo arrasado por la naturaleza pero nunca derrotado.
Hagamoslo como un testimonio de que no nos hemos olvidado de las víctimas del terremoto, un testimonio de nuestra real solidaridad, como un homenaje a nuestro amigo y compañero Hector Bustos que acaba de partir y que sabemos tenía sueños e ideales de un mundo mejor.
Es cierto, es más fácil reunirnos en un lugar cómodo, disfrutar de un almuerzo pantagruelico, regocijarnos de estar juntos, nosotros, los de siempre; tal vez nos llenaremos la panza de manjares e hinchemos nuestro abdomen con libaciones refrescantes e hilarantes; pero si nos juntamos en Dichato, aunque sea en torno a una olla común, aunque no contemos con comodidades, aunque el acceso sea complicado, les aseguro que disfrutaremos la alegría de muchos lugareños de sentir que no están solos, que sus compatriotas no les hemos olvidado, nos regocijaremos de compartir nuestro "banquete" con un grupo de representantes de la comunidad que están dando la lucha por que los escuchen, por levantarse, por que el Estado responda a sus demandas. Les aseguro que no nos llenaremos la panza, pero si nos llenaremos de amor, de alegría de sentirnos partícipe de un proceso de recuperación, de un proceso de reconstrucción no ya de casas o de infraestructura sino de la reconstrucción del alma de un pueblo.
Quizas suene pretencioso, pero creo que vale la pena intentarlo, los que lleguemos de afuera, de Santiago, del Norte, del Centro, podremos hacer campaña previa y llevar aportes para la comunidad, tal vez precarios pero llenos de solidaridad, de contención, de amor.
No dejemos que la historia pase por nuestro lado, construyamos nuestra propia historia.
Les dejo la inquietud y cuenten con toda mi colaboración.
Agradecido
Hernán Morales F.
Hernán Morales F.